Durante muchos años se han realizado diversos estudios para poder llegar a la conclusión de que el juego favorece la creatividad y el desarrollo intelectual. Queremos tratar la idea en estas líneas acerca del escape room como modelo educativo.
Durante el juego la actividad mental es continua, es un ejercicio perfecto para nuestros sentidos, durante los juegos desarrollamos nuestra capacidad de pensar.
El juego, es fundamental en niños, para su desarrollo intelectual y creativo, pero también lo es para los adultos, ya que jugar tiene las mismas ventajas en niños y adultos, el juego nos hace tener más habilidad y rapidez de pensamiento, somos más resolutivos, más creativos, dejamos que nuestra imaginación nos lleve a descubrir nuevas formas de resolver problemas. Además cuando jugamos disfrutamos, nos divertimos, de modo que estamos haciendo algo lúdico a la par que educativo.
Educar con juegos
Un escape room puede ser una herramienta perfecta como modelo educativo para desarrollar nuestra imaginación e inteligencia, nos pone a prueba frente a desafíos mentales que debemos resolver en un tiempo y espacio concreto, en un escape room también aprendemos a desenvolvernos bajo presión, disponemos de un tiempo limitado para resolver el acertijo y poder acceder a lo siguiente.
Además algo que es muy destacable, es que el escape room potencia el trabajo en equipo, algo que es vital para la vida cotidiana. Nos ayuda a relacionarnos con nuestros compañeros teniendo un objetivo común, y nos ayuda a crear estrategias que nos acerquen a nuestro propósito. Además en este tipo de juegos se ve cómo cada persona toma su rol de forma muy orgánica, se ve claramente quienes tienen facilidades para tomar el control y decisiones, quienes prefieren dejar que otros decidan, etc.
Cada vez son más las escuelas que están integrando el modelo de juego de escape room como herramienta educativa. A través de estos juegos se desarrollan las habilidades mentales para resolver enigmas, afrontar retos, trabajar en equipo para superar pruebas y desarrollar la creatividad, en un entorno divertido.
En un escape room hay un patrón que suele repetirse:
- Un grupo de jugadores (a partir de 2 personas)
- Una o varias salas en las que se lleva a cabo el juego
- Enigmas, puzzles, acertijos, problemas… que solucionar
- Pistas para continuar el juego en algunos momentos concretos
- Resolución final, en el que resuelves el objeto del juego.
Estos juegos tienen una temática y un hilo conductor que va creando una historia que contextualiza el juego y le da sentido. Hay un sinfín de juegos de escape room, desde ficción, aventuras, hasta terror, y también para todas las edades, hay algunos que están diseñados para los más pequeños, para jugar en familia, con amigos, para adultos, etc.